Historia y personajes

¿Semejanzas ocultas?

Inicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivado
 

Siempre hemos oído hablar que la iglesia de Cebreros tiene un gran parecido con la del Monasterio de El Escorial y con la Iglesia de los Jerónimos de Guisando y que en su construcción había participado Juan de Herrera (constructor de El Escorial a la muerte de Juan Bautista de Toledo); aunque consta que los planos de la iglesia de Santiago Apóstol de Cebreros son de Covarrubias, fallecido en 1569.

Pedro de Tolosa, primer maestro de cantería y aparejador del Monasterio de El Escorial participó en la reconstrucción de la Iglesia de San Jerónimo de Guisando, en la construcción del Monasterio de El Escorial y según la teoría de Manuel Gómez Moreno y Piedad Rodríguez Robledo en su tesis 'Pedro de Tolosa, primer maestro de cantería de El Escorial' y la monografía de Israel Prieto Mateos 'Guisando no sólo cuatro toros' pudiera haber participado en la obra de la Iglesia de Cebreros ya que estuvo trabajando en esta zona en los años 1562 y 1575, (ya que por entonces vivía en San Martín de Valdeiglesias).

Comparando la cúpula exterior de la Basílica del Monasterio de El Escorial con el sagrario del Retablo Mayor de la Iglesia de Cebreros, vemos que existe una gran similitud. Al mismo tiempo volviendo a comparar la fachada del Patio de los Reyes del Monasterio con el Retablo del altar Mayor, seguimos encontrando una gran semejanza, sobre todo en el remate superior terminado en un triángulo con cinco bolas; el número y la forma de huecos de ventanas, puertas y balcones de la fachada del Patio de los Reyes coincide con el número de los cuadros y hornacinas del retablo de la iglesia de Cebreros. ¿Qué se pretendía imitar? Un dato que caracterizaba a Juan de Herrera era que utilizaba pirámides y bolas para coronar sus obras.

En el Monasterio de El Escorial también se encuentran dichas bolas terminando en una cruz. En el interior de las bolas se encuentran reliquias depositadas a modo de improvisados pararrayos. Una bola semejante también está presente en la torre de la Iglesia de Cebreros. (Una veleta asentada sobre una pilastra cuadrada a modo de chapitel y acabada en una aguja constituida por una esfera sobre plinto). Esta esfera era de madera recubierta de metal, quedando destruida el 9 de septiembre de 1996 por la caída de un rayo, que provocó el incendio posterior, siendo nosotros testigos del suceso, así como parte de los vecinos y no siendo el único rayo que volvería a caer.

¿Estas bolas pueden tener explicación con lo que en física se denomina esfera de Gauss?

En el frontispicio de la entrada de a la Sacristía Parroquial de Cebreros, (portada de la anterior Iglesia de Santiago Apóstol), se encuentra tallado en piedra un dragón, la cabeza de un querubín, el busto de Santiago Apóstol, una cruz y una espada. Se puede suponer que el dragón representa las fuerzas telúricas de la tierra en ese lugar, las energías que allí se encuentran. Se piensa que por esas mismas fuerzas y energías se eligió el lugar del Monasterio de El Escorial y el San Jerónimo de Guisando.

El Rey Felipe II designó una comisión para buscar el emplazamiento del Monasterio de El Escorial.

En un principio se pensó en el sitio de Guisando, pero vio que no había llano ni suelo en toda aquella sierra donde cupiesen sus designios. Además había una gran distancia entre el cerro de Guisando y Madrid. Se pensó entonces en la Sierra de Guadarrama.

En la comisión designada por el Rey se encontraba el Padre Fray Juan de Huete y Fray Juan de Colmenar, prelado y vicario del Monasterio de Guisando respectivamente; Juan Bautista de Toledo y Pedro de la Hoz.

Todos los citados acudieron a Guadarrama para el día de San Andrés y después llegaron a la Villa de El Escorial, donde caminaron juntos a examinar el sitio elegido, pero al comenzar a subir la cuesta, se levantó un furioso torbellino que les acobardó. Fray Juan de Colmenar dijo en voz alta a todos los que iban con él: “El demonio despierta esta tempestad para que desmayemos o para engañarnos, más no ha de sacar de el ningún fruto, pasemos adelante y no hagamos caso de su malicia”. La leyenda dice que fue la acción de los relámpagos la que hizo comprender donde se hallaba el lugar. Además había muchas fuentes de buena agua y piedras llamadas marquesitas. El cerro de Guisando es un lugar apropiado para las descargas de las tormentas. Los Jerónimos de Guisando aseguran que fue un rayo el que partió a uno de los toros de piedra antes de 1571. Nosotros hemos sido testigos de los últimos incendios provocados por rayos en esta zona. A parte el topónimo de Guisando significa sitio de fuentes y manantiales, siendo el agua una fuente de energía.

Como acabamos de exponer tanto el Monasterio de El Escorial como el Monasterio de Guisando están construidos sobre lugares altamente energéticos. ¿Podemos suponer que por esta misma razón se erigió la Iglesia de Cebreros en su actual ubicación? Sabemos que la Iglesia de los Jerónimos de Guisando sufrió un incendio en 1546 por la proximidad del monte y el descuido de unos pastores y que se comenzó a reconstruir en 1547 y que no estaba terminada antes de fines del siglo XVI.

Según el libro de Actas Capitulares de la Catedral de Ávila, figurando también en el Archivo Histórico Provincial, la Iglesia de Santiago Apóstol de Cebreros se comenzó a construir a partir del año 1550. El Monasterio de El Escorial se decidió su construcción después de la Batalla de San Quintín en el año 1557 por Felipe II, y su construcción comenzó el año 1563. ¿Pudiera ser que el Monasterio de El Escorial tuviera su proyección en estas iglesias?

Josefina Mateos Madrigal e Israel Prieto Mateos

Artículo publicado en el Diario de Ávila el 10 de agosto del 2000.


© 2024 Nuestro Rincón de Cebreros. Todos los derechos reservados.