Los musulmanes, establecidos en el norte de África al comenzar el siglo VIII, después de una rápida expansión, alcanzaron la orilla del Atlántico en el año 707. El territorio de África, dominado antes por los romanos, los vándalos y los bizantinos, se organizó bajo el mando del gobernador árabe Muza lbn Nusayar, que sin contar con el califa omeya de Damasco, AI- Walid, de quien dependía, decidió ocupar las tierras costeras de Hispania, pertenecientes al reino visigodo.
Por entonces había accedido al trono visigodo, en junio del año 710, el duque de la región Bética, Don Rodrigo, como sucesor del rey Witiza, intentando recuperar el poder desde Toledo, capital del reino godo, donde se hacía difícil dominar a los disconformes.
Había unas grandes perspectivas de botín en España, según las informaciones recibidas por los judíos exiliados, que estimularon a los árabes a atravesar el estrecho.
Así el ejército de Muza lnb Nusayar, compuesto mayoritariamente por bereberes, al mando de Tarik Abu Zara, cruzó el estrecho en julio del año 710 con trescientos infantes y cien caballeros para realizar una expedición de saqueo.
Asombrado por este saqueo por lo bien y rápido que había sucedido, obteniendo un suculento botín, el gobernador Muza lbn Nusayar organizó una nueva expedición compuesta por siete mil hombres, casi todos beréberes y una parte de libertos árabes, designando como jefe a su lugarteniente Tarik Abu Zara, que cruzó el estrecho a finales del mes de abril del año 711, y durante dos meses sus actividades se orientaros a garantizar el paso de las nuevas tropas ala Península mediante una cabeza de puente en el lugar donde se alza la ciudad de Algeciras.
Desembarcadas sus tropas en la Península, Tarik emprende su viaje hacia el interior, que se interrumpió por el encuentro con las tropas de Don Rodrigo, en la Batalla de Guadalete, el 19 de julio del año 711, concluyendo con la victoria del ejército bereber, a orillas del río Guadalete.
La existencia de excelentes vías prerromanas y romanas, en buen uso aún, facilitó el avance de las tropas. Utilizando las calzadas de Sevilla a León, pasando por Toledo para penetrar por los Toros de Guisando, remontando el río Alberche, cruzando Arrebatacapas ( Cebreros ) hacia Segovia. ( M. Riu Riu, La España lslámica).
La vieja crónica sobre la conquista sarracena de España, cuentan que el año 93 de Hégida y 712 de la era cristiana, las huestes de Tarik, que tomaba Toledo, salieron hacia el Norte en persecución de los nobles godos, usando el puerto de Somosierra, más bajo y más expugnable, erigiendo en sus cercanías sus propias atalayas, lo mismo hicieron por el alto de Arrebatacapas. ( A. Campos, El País ).
Concluida la Batalla de Guadalete, y debido al buen estado de estas calzadas, Tarik, decidió avanzar hacia el interior de la Península iniciando un procesos que durará, aproximadamente, cuarenta años, teniendo como sentado el dominio y la instalación de los musulmanes en España, así nos consta. (A. García Cortazar, JIO de España Alfaguara ).
Con el control militar por parte de Tarik, como resultado de una serie de campañas, es la dominación y establecimiento de los musulmanes. El reconocimiento y la toma de posesión del nuevo país, se realiza rápidamente en su mayor parte entre los años 711 y 714, por las tropas que dirigían Tarik y Muza.
Tarik encontró poca resistencia en los núcleos dominados por Don Rodrigo, mientras avanzaba con rapidez en las zonas gobernadas por los witizianos. Los itinerarios de conquista siguieron las calzadas romanas.
Tomó Toledo, donde habían huido muchos de los habitantes, que permitió a Tarik coger un amplio botín y la posibilidad de proseguir sus campañas, dejando a sus espaldas guarniciones que garantizasen el dominio de cada zona conquistada, y sobre todo el control de las comunicaciones.
Tomadas estas precauciones, Tarik, se dirige al Norte por Guadalajara, Buitrago y Clunia para llegar a Amaya y desde aquí a León, desde donde retrocedió hasta Toledo, pasando el puerto de Arrebatacapas ( Cebreros ), controlando los pasos, usando la calzada prerromana cruzando el río Alberche, " los Toros de Guisando, donde se levantan las esculturas de los Toros de Guisando, esculturas zoomorfas prerromanas, que por su talla y número hacer pensar que era un cruce o paso muy importante, alude a la importancia crucial del lugar y las mismas esculturas hacen remontar la importancia a la época prerromana. " ( A. Gabo, Hª de España Alfaguara ).
Quedando así reconocida la meseta norte, asentamiento fundamental de la minoría goda.
A Tarik le debió parecer la breve incursión en la Península insuficiente que reclamó la venida de su señor Muza con nuevos hombres para hacer unas nuevas campañas.
Así entre los años 713 y 714 son reconocidas nuevas campañas bajando de León a Toledo por el alto de Arrebatacapas. ( C. Sánchez Albornoz, España Musulmana ).
El mapa, según el código musulmán, representa la Conquista de España por los Musulmanes. (La España Musulmana de Claudio Sánchez Albornoz.)
Francisco Prieto García